Romper viejos acuerdos.

Mayas


EL CAMINO TOLTECA HACIA LA LIBERTAD

Romper viejos acuerdos.

Todos hablan de libertad. Distintas personas, diferentes razas y distintos países luchan por la libertad en todo el mundo. Pero ¿qué es la libertad? En Estados Unidos decimos que vivimos en un país libre. Sin embargo, ¿somos realmente libres? ¿Somos libres para ser quienes realmente somos? La respuesta es no, no somos libres. La verdadera libertad está relacionada con el espíritu humano: es la libertad de ser quienes realmente somos.

¿Quién nos impide ser libres? Culpamos al Gobierno, al clima, a nuestros padres, a la religión, a Dios...

¿Quién nos impide, realmente, ser libres? Nosotros mismos. ¿Qué significa, en realidad, ser libres? A veces nos casamos y decimos que perdemos nuestra libertad, pero cuando nos divorciamos, seguimos sin ser libres. ¿Qué nos lo impide? ¿Por qué no podemos ser nosotros mismos?

Tenemos recuerdos de tiempos pasados en los que éramos libres y disfrutábamos de ello, pero hemos olvidado lo que verdaderamente significa la libertad.

Si vemos a un niño de dos o tres años, o quizá de cuatro, descubrimos un ser humano libre. ¿Por qué lo es? Porque hace lo que quiere hacer. El ser humano es completamente salvaje, igual que una flor, un árbol o un animal que no ha sido domesticado: ¡salvaje! Y si observamos a estos seres humanos de dos años de edad, descubrimos que la mayor parte del tiempo sonríen y se divierten. Exploran el mundo. No les da miedo Jugar. Sienten miedo cuando se hacen daño, cuando tienen hambre y cuando algunas de sus necesidades no se ven satisfechas; pero no les preocupa el pasado, no les importa el futuro y sólo viven en el momento presente.

Los niños muy pequeños no tienen miedo de expresar lo que sienten. Son tan afectuosos que, si perciben amor, se funden en él. No les da miedo el amor. Esta es la descripción de un ser humano normal.

De niños, no le tenemos miedo al futuro ni nos avergonzamos del pasado. Nuestra tendencia natural es disfrutar de la vida, jugar, explorar, ser felices y amar.

Pero ¿qué le ha pasado al ser humano adulto? ¿Por qué somos tan diferentes? ¿Por qué no somos salvajes? Desde el punto de vista de la Víctima, diremos que nos ocurrió algo triste, y desde el punto de vista del guerrero, diremos que lo que nos sucedió fue normal. Lo que pasa es que el Libro de la Ley, el gran Juez, la Víctima y el sistema de creencias dirigen nuestra vida, y ya no somos libres porque no nos permiten ser quienes realmente somos. Una vez nuestra mente ha sido programada con toda esa basura, dejamos de ser felices.

Esta cadena de aprendizaje que se transmite de un ser humano a otro, de generación en generación, es muy corriente en la sociedad humana. No culpes a tus padres por enseñarte a ser como ellos. ¿Qué otra cosa podían enseñarte sino lo que sabían? Lo hicieron lo mejor que supieron, y si te maltrataron, fue debido a su propia domesticación, a sus propios miedos y a sus propias creencias. No tenían ningún control sobre la programación que ellos mismos recibieron, de modo que no podían actuar de otra forma.

No culpes a tus padres ni a ninguna otra persona que te haya maltratado en la vida, incluyéndote a ti mismo. Pero ya es hora de poner fin a ese maltrato. Ya es hora de que te liberes de la tiranía del Juez y de que cambies los fundamentos de tus propios acuerdos. Ya es hora de que te liberes del papel de Víctima.

Tu verdadero yo es todavía un niño pequeño que nunca creció. En ocasiones, cuando te diviertes o juegas, cuando te sientes feliz, cuando pintas, escribes poesía o tocas el piano, o cuando te expresas de cualquier otro modo, ese niño pequeño reaparece. Estos son los momentos más felices de tu vida: cuando surge tu yo verdadero, cuando no te importa el pasado y no te preocupas por el futuro. Entonces eres como un niño.

Pero hay algo que cambia todo esto: son lo que llamamos responsabilidades. El Juez dice: «Espera un momento; eres responsable; tienes cosas qué hacer; tienes que trabajar; tienes que ir a la universidad; tienes que ganarte la vida». Nos acordamos de todas estas responsabilidades y la expresión de nuestro rostro cambia y se ensombrece de nuevo. Si observas a unos niños que juegan a ser adultos, verás de qué manera se transforma la expresión de su cara. Un niño dice: «Juguemos a que soy un abogado», e inmediatamente adopta la expresión del adulto. Si asistimos a un juicio, esas son las caras que vemos, y eso es lo que somos.

Sin embargo, todavía somos niños, pero hemos perdido nuestra libertad.

La libertad que buscamos es la de ser nosotros mismos, la de expresarnos tal como somos. Sin embargo, si observamos nuestra vida, veremos que, en lugar de vivir para complacernos a nosotros mismos, la mayor parte del tiempo sólo hacemos cosas para complacer a los demás, para que nos acepten. Esto es lo que le ha ocurrido a nuestra libertad. En nuestra sociedad, y en todas las sociedades del mundo, de cada mil personas, novecientas noventa y nueve están totalmente domesticadas.

Lo peor de todo es que la mayoría de la gente ni siquiera se da cuenta de que no es libre. Algo en su interior se lo susurra, pero no lo comprende, y no sabe por qué no es libre.

Para la mayoría de las personas, el problema reside en que viven sin llegar a descubrir que el Juez y la Víctima dirigen su vida, y por consiguiente, no tienen la menor oportunidad de ser libres. El primer paso hacia la libertad personal consiste en ser conscientes de que no somos libres. Necesitamos ser conscientes de cuál es el problema para poder resolverlo.

El primer paso es siempre la consciencia, porque hasta que no seas consciente no podrás hacer ningún cambio. Hasta que no seas consciente de que tu mente está llena de heridas y de veneno emocional, no limpiarás ni curarás las heridas y continuarás sufriendo.

No hay ninguna razón para sufrir. Si eres consciente, puedes rebelarte y decir: «¡Ya basta!». Puedes buscar una manera de sanar y transformar tu sueño personal. El sueño del planeta es sólo un sueño. Ni tan siquiera es real. Si entras en el sueño y empiezas a poner en tela de juicio tu sistema de creencias, descubrirás que la mayor parte de las creencias que abrieron heridas en tu mente ni siquiera son verdad.

Descubrirás que durante todos estos años has vivido un drama por nada. ¿Por qué? Porque el sistema de creencias que te inculcaron está basado en mentiras.

Por ello es muy importante para ti que domines tu propio sueño; este es el motivo por el que los toltecas se convirtieron en maestros del sueño. Tu vida es la manifestación de tu sueño; es un arte. Y puedes cambiar tu vida en cualquier momento si no disfrutas de tu sueño. Los maestros del sueño crean una vida que es una obra maestra; controlan el sueño a través de sus elecciones. Todo tiene sus consecuencias, y un maestro del sueño es consciente de ellas.

Ser un tolteca es una forma de vivir en la cual no existen los líderes ni los seguidores, donde tú tienes y vives tu propia verdad. Un tolteca se vuelve sabio, se vuelve salvaje y se vuelve libre de nuevo.

Existen tres maestrías que llevan a la gente a convertirse en toltecas. La primera es la Maestría de la Consciencia: ser conscientes de quiénes somos realmente, con todas nuestras posibilidades. La segunda es la Maestría de la Transformación: cómo cambiar, cómo liberarnos de la domesticación. La tercera es la Maestría del Intento: desde el punto de vista tolteca, el Intento es esa parte de la vida que hace que la transformación de la energía sea posible; es el ser viviente que envuelve toda energía, o lo que llamamos «Dios».

Es la vida misma; es el amor incondicional. La Maestría del Intento es, por tanto, la Maestría del Amor.

Hablamos del camino tolteca hacia la libertad porque los toltecas tienen un plan completo para liberarse de la domesticación. Comparan al Juez, a la Víctima y el sistema de creencias con un parásito que invade la mente humana. Desde el punto de vista tolteca, todos los seres humanos domesticados están enfermos. Lo están porque un parásito controla su mente y su cerebro, un parásito que se alimenta de las emociones negativas que provoca el miedo.

Si buscamos la descripción de un parásito, vemos que es un ser vivo que subsiste a costa de otros seres vivos, chupa su energía sin dar nada a cambio y daña a su anfitrión poco a poco. El Juez, la Víctima y el sistema de creencias encajan muy bien en esta descripción. Juntos, constituyen un ser viviente formado de energía psíquica o emocional, y esa energía está viva. No se trata de energía material, por supuesto, pero las emociones tampoco son energía material, ni lo son nuestros sueños, y sin embargo, sabemos que existen.

Una función del cerebro es la de transformar la energía material en energía emocional. Nuestro cerebro es una fábrica de emociones. Y ya hemos dicho que la principal función de la mente es soñar. Los toltecas creen que el parásito -el Juez, la Víctima y el sistema de creencías-controla nuestra mente y nuestro sueño personal. El parásito sueña en nuestra mente y vive en nuestro cuerpo. Se alimenta de las emociones que surgen del miedo, y le encantan el drama y el sufrimiento.

La libertad que buscamos consiste en utilizar nuestra propia mente y nuestro propio cuerpo, en vivir nuestra propia vida en lugar de la vida de nuestro sistema de creencias. Cuando descubrimos que nuestra mente está controlada por el Juez y la Víctima y que nuestro verdadero yo está arrinconado, sólo tenemos dos opciones.

Una es continuar viviendo como lo hemos hecho hasta ese momento, rindiéndonos al Juez y la Víctima, seguir viviendo en el sueño del planeta. La otra opción es actuar como cuando éramos niños y nuestros padres intentaban domesticarnos. Podemos rebelarnos y decir: «¡No!». Podemos declarar una guerra contra el parásito, contra el Juez y la Víctima, una guerra por nuestra independencia, por el derecho de utilizar nuestra propia mente y nuestro propio cerebro.

Por este motivo, quienes siguen las tradiciones chamánicas de América, desde Canadá hasta Argentina, se llaman a sí mismos guerreros, porque están en guerra contra el parásito de la mente. Esto es lo que significa en verdad ser un guerrero. El guerrero es el que se rebela contra la invasión del parásito. Se rebela y le declara la guerra. Pero eso no quiere decir que siempre se gane; quizá ganemos o quizá perdamos, pero siempre hacemos lo máximo que podemos, y al menos tenemos la oportunidad de recuperar nuestra libertad. Elegir este camino nos da, como mínimo, la dignidad de la rebelión y nos asegura que no seremos la víctima desvalida de nuestras caprichosas emociones o de las emociones venenosas de los demás. Incluso aunque sucumbamos ante el enemigo -el parásito-, no estaremos entre las víctimas que no se defienden.

En el mejor de los casos, ser un guerrero nos da la oportunidad de trascender el sueño del planeta y cambiar nuestro sueño personal por otro al que llamamos Cielo. Igual que el Infierno, el Cielo es un lugar que existe en nuestra mente. Es un lugar lleno de júbilo, en el que somos felices, en el que somos libres para amar y para ser nosotros mismos. Podemos alcanzar el Cielo en vida; no tenemos que esperar a morirnos.

Dios siempre está presente y el reino de los Cielos está en todas partes, pero en primer lugar necesitamos que nuestros ojos sean capaces de ver la verdad y nuestros oídos puedan escucharla. Necesitamos librarnos del parásito.

Podemos comparar el parásito con un monstruo de cien cabezas. Cada una de ellas es uno de nuestros miedos. Si queremos ser libres, tenemos que destruir el parásito. Una solución es atacar sus cabezas una a una, es decir, enfrentarnos a nuestros miedos uno a uno. Es un proceso lento, pero funciona. Cada vez que nos enfrentamos a uno de nuestros miedos, somos un poco más libres.

Una segunda solución sería dejar de alimentar al parásito. Si no le damos ningún alimento, lo mataremos por inanición. Para poder hacerlo, tenemos que ser capaces de controlar nuestras emociones, debemos abstenernos de alimentar las emociones que surgen del miedo. Resulta fácil decirlo, pero es muy difícil hacerlo, porque el Juez y la Víctima controlan nuestra mente.

Una tercera solución es la que se denomina la iniciación a la muerte. Esta iniciación se encuentra en muchas tradiciones y escuelas esotéricas de todo el mundo. La hallamos en Egipto, la India, Grecia y América. Es una muerte simbólica que mata al parásito sin dañar nuestro cuerpo. Cuando «morimos» simbólicamente, el parásito también tiene que morir. Esta solución es más rápida que las dos anteriores, pero resulta todavía más difícil. Necesitamos un gran valor para enfrentarnos al ángel de la muerte. Tenemos que ser muy fuertes.




Los CUATRO ACUERDOS
Hace miles de años los toltecas eran conocidos en todo el sur de México como «mujeres y hombres de conocimiento». Los antropólogos han definido a los toltecas como una nación o una raza, pero, de hecho, eran científicos y artistas que formaron una sociedad para estudiar y conservar el conocimiento espiritual y las prácticas de sus antepasados.
La conquista europea, unida a un agresivo abuso del poder personal por parte de algunos aprendices, hizo que los naguales se vieran forzados a esconder su sabiduría ancestral y a mantener su existencia en la oscuridad. Por fortuna, el conocimiento esotérico tolteca fue conservado y transmitido de una generación a otra por distintos linajes de naguales. Ahora, el doctor Miguel Ruiz, un nagual del linaje de los Guerreros del Águila, comparte con nosotros las profundas enseñanzas de los toltecas.
«No hay razón para sufrir. La única razón por la que sufres es porque así tú lo exiges. Si observas tu vida encontrarás muchas excusas para sufrir, pero ninguna razón válida. Lo mismo es aplicable a la felicidad.
La única razón por la que eres feliz es porque tú decides ser feliz. La felicidad es una elección, como también lo es el sufrimiento».
Dr. Miguel Ruiz


Extracto del libro: Los Cuatro Acuerdos.
Un libro de sabiduría tolteca Dr. Miguel Ruiz

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2 Comentarios de lectores

28/12/2009

Estoy fascinada con el informe sobre el Kin del día de hoy, porque me atrae poderosamente saber que con las palmas se puede sanar.

Muchas gracias porque proporcionan estos grandes conocimientos a personas que como su servidora no estamos en posibilidad de pagar en cursos o similares.

Varios detalles deseo manifestarles, siento el gran deseo de aprender a sanar, ignoro sobre cómo debo prepararme, pues la frustración y la impotencia que siento ante alguien a quien le duele un oído, muela, cabeza o rodilla, en fin, es tremenda, así como, tener frente a uno un ave o animalito o planta que tanto amo y necesitan ayuda (porque imagino que también a ellos los puedo ayudar). Por otra parte, les comento que soy reservada y conservo como auto ayuda la sabia y valiosa información que me comparten, después de leerla, analizarla y aplicarla en mi, me siento liberada, con mayor conciencia y logro identificar que desde niña, tenía el fuerte impulso por saber todo esto y hasta el día de hoy he encontrado en ustedes esta maravillosa relación de saber, platicar, compartir y unirme en paz y respeto en fraternidad, en la vida rutinaria, no he tenido trato con personas que piensen o sepan sobre los temas que a nosotros nos interesan y eso impide que tenga yo la dicha de platicar o compartir algún conocimiento, pues piensan que es uno raro o bruja o lo mal interpretan y se encierran en si mismas y les veo sufrir, llorar, rezar y pedir con desesperación y a veces me pregunto si ustedes autorizan que uno comente algo o debe uno guardar en secreto y como auto ayuda el aprendizaje que me otorgan. Unicamente deseo respetar y no ser indiscreta si puedo evitarlo antes mediante su amable respuesta a mis dudas. Disculpen mi pregunta tonta por favor, pero en un par de ocasiones por preguntar en un grupo de gnosis de Samael Aun Weor fui ridiculizada y puesta en evidencia por medio del instructor y eso me orillo más a seguir aislada y leer por mi misma lo que deseo saber, no encuentro todavía que hice de malo, pues en esa ocasión se comentó que debemos aprender a ser cuerpos solares, no lunares y yo ignorando cómo se logra hacer eso, pregunté y lejos de recibir la respuesta que aclarará mi duda, recibí un... ¿cómo me pregunta usted eso a estas alturas? de parte del instructor quien nunca había platicado sobre este tema en unas nueve clases anteriores. Lo curioso, fue que el resto de los ahí presentes parecían ávidos de saber lo mismo que yo, pero todos callaron. Y por último, les comento que leyendo el artículo sobre Roy Littlesun Indio Hopi, tan interesante que lo escribí y lo pegue sobre la puerta de la cocina y además descubrí por primera vez en un pequeño recuadro que ahí aparece el video de Krishnamurti que me dejo boquiabierta, me impacto tanto, que ahora anhelo saber y leer más sobre El, todo el día pienso en lo que nos enseñó y me siento increíblemente bien. Me pregunto cómo no sabía yo antes sobre este maravillosos personaje, lo necesitaba. Muchisímas gracias, en verdad. Un fuerte abrazo de luz.

Daen desde Mexico.

-.-.-



Hola Daen. Gracias por escribir.


El 16 de Diciembre del 2009 tuvimos un KIN Mano Auto-Existente Azul - Sello 7 Tono 4

Identifico la Forma.
Los días MANO desciende a la Tierra el don de la curación. son ideales para la limpieza del cuerpo, de la mente y del espíritu. En la palma de la mano está el poder de curar; debemos utilizarlo. Todos somos sanadores por naturaleza, de modo que es preciso manifestar este poder. El Kin Mano es un día de realización, hay que completar cosas y poner manos a la obra.

Hermoso, sí!.

Si sentís que tenes que hacer algo... tratá de ver la posibilidad de hacerlo. Si bien podes apuntar a un proyecto grande, podes empezar por esas tan eficientes técnicas de sanación transmitidas oralmente. Seguro que en la medida que te vayas abriendo vas a ir cruzándote con las técnicas más apropiadas para vos y las posibilidades de aprender y desarrollarlas se van a ir dando...

Sobre la impotencia que sentís... algo que se debe tener claro es que debes "entregar y soltar".
hay muchas razones por las que una persona puede sanar o no. Es más. Una de las primeras cosas que recuerdo haber escuchar es la posibilidad de ayudar a morir/liberar a una persona cuando nuestra intención egoica intenta retenerla más en la tierra. Lo que puede producir un trauma en el sanador/terapeuta. O frustración al no sanar a una persona.
Esto suele pasar porque desconocemos muchas cosas. Desconocemos el 99% del plan. Desconocemos incluso que entre el terapeuta/paciente debe existir un común acuerdo más allá de la palabra.

Creo que es importante tener muy presente el "entregar y soltar". Tomar consciencia que lo mejor sucederá para ambos y no solo para uno.


Imagino tu desilusión sobre aquel maestro. También está jugando a ser humano. Seguramente lo hizo para impulsarte a buscar más lo que necesitas para este aquí y ahora.


Sobre hablar o no hablar. Creo apropiados tener presentes los 4 acuerdos de Sabiduría Toltecas.
Sé Impecable Con Tus Palabras. No te tomes nada personalmente. No hagas suposiciones. Haz siempre lo máximo que puedas.


Abrazo de Oso de Luz

16/12/2009

Estoy fascinada con el informe sobre el Kin del día de hoy, porque me atrae poderosamente saber que con las palmas se puede sanar.

Muchas gracias porque proporcionan estos grandes conocimientos a personas que como su servidora no estamos en posibilidad de pagar en cursos o similares.

Varios detalles deseo manifestarles, siento el gran deseo de aprender a sanar, ignoro sobre cómo debo prepararme, pues la frustración y la impotencia que siento ante alguien a quien le duele un oído, muela, cabeza o rodilla, en fin, es tremenda, así como, tener frente a uno un ave o animalito o planta que tanto amo y necesitan ayuda (porque imagino que también a ellos los puedo ayudar).

Por otra parte, les comento que soy reservada y conservo como auto-ayuda la sabia y valiosa información que me comparten, después de leerla, analizarla y aplicarla en mi, me siento liberada, con mayor conciencia y logro identificar que desde niña, tenía el fuerte impulso por saber todo esto y hasta el día de hoy he encontrado en ustedes esta maravillosa relación de saber, platicar, compartir y unirme en paz y respeto en fraternidad, en la vida rutinaria, no he tenido trato con personas que piensen o sepan sobre los temas que a nosotros nos interesan y eso impide que tenga yo la dicha de platicar o compartir algún conocimiento, pues piensan que es uno raro o bruja o lo mal interpretan y se encierran en si mismas y les veo sufrir, llorar, rezar y pedir con desesperación y a veces me pregunto si ustedes autorizan que uno comente algo o debe uno guardar en secreto y como auto-ayuda el aprendizaje que me otorgan.

Unicamente deseo respetar y no ser indiscreta si puedo evitarlo antes mediante su amable respuesta a mis dudas. Disculpen mi pregunta tonta por favor, pero en un par de ocasiones por preguntar en un grupo de gnosis de Samael Aun Weor fui ridiculizada y puesta en evidencia por medio del instructor y eso me orillo más a seguir aislada y leer por mi misma lo que deseo saber, no encuentro todavía que hice de malo, pues en esa ocasión se comentó que debemos aprender a ser cuerpos solares, no lunares y yo ignorando cómo se logra hacer eso, pregunté y lejos de recibir la respuesta que aclarará mi duda, recibí un... ¿cómo me pregunta usted eso a estas alturas? de parte del instructor quien nunca había platicado sobre este tema en unas nueve clases anteriores. Lo curioso, fue que el resto de los ahí presentes parecían ávidos de saber lo mismo que yo, pero todos callaron.

Y por último, les comento que leyendo el artículo sobre Roy Littlesun Indio Hopi, tan interesante que lo escribí y lo pegue sobre la puerta de la cocina y además descubrí por primera vez en un pequeño recuadro que ahí aparece el video de Krishnamurti que me dejo boquiabierta, me impacto tanto, que ahora anhelo saber y leer más sobre El, todo el día pienso en lo que nos enseñó y me siento increíblemente bien.

Me pregunto cómo no sabía yo antes sobre este maravilloso personaje, lo necesitaba.

Muchisímas gracias, en verdad.
Un fuerte abrazo de luz.

Daen desde Mexico

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* Hoy es 16 de Diciembre del 2009

* KIN de hoy. Mano Auto-Existente Azul
Sello 7 Tono 4

Identifico la Forma.
Los días MANO desciende a la Tierra el don de la curación. son ideales para la limpieza del cuerpo, de la mente y del espíritu. En la palma de la mano está el poder de curar; debemos utilizarlo. Todos somos sanadores por naturaleza, de modo que es preciso manifestar este poder. El Kin Mano es un día de realización, hay que completar cosas y poner manos a la obra.

* Numerologia Universal.
Energia del Dia 3 ~ La nota clave es la auto-expresión. Es día sociable, bueno para el entretenimiento. Visite salones de belleza, teatros o salones de baile. Sobresaldrá la actividad y la energía nerviosa.
Energia del Mes 5 ~ Mes de Viajes, ventas, propaganda, deportes, especulación, entusiasmo.
Energia del Año 11 ~ Año maestro gobernado por el idealismo y la inspiración. Florecerán los intereses religiosos, y la gente se preocupará por el Ocultimso, el espiritismo y lo Evangélico. Atestadas reuniones sobre renacimiento. La psicología será tema de discusión. Buen año para asuntos de promoción, aunque los negocios no descuellen en las mentes de los individuos.