Amanecer.

Varios/Otros


Trigueirinho


El Sol siempre está presente, pero, en un mismo instante, su luz no puede ser percibida de igual manera en todas las regiones del planeta. Los ciclos y las fases son premisas de la manifestación en las esferas concretas. No obstante, más arriba reina la imperturbable bienaventuranza, océano de pura consciencia, manantial infinito de amor y poder. Sois invitados a penetrar en este misterio. Reconoceos como esencia. Sois plenos. Podéis vivir en plenitud.


1. La conciencia del hombre no necesita limitarse al ámbito de este sistema solar. Ella debe expandirse, alcanzar universos distantes y fundirse en las energías de ellos. Ese viaje no es realizado en cohetes, sino en espíritu. Nuestras naves son manifestaciones vivas de la conciencia, son luz por eso, para ellas no hay límite de tiempo ni de espacio. Si el hombre supiese la inmensidad que lo aguarda, tal vez se dispondría a buscar la ley. La ley habita en la esencia del ser; por eso la trascendencia de fronteras ocurre primero en su interior, para luego reflejarse en la existencia material. La vida terrestre clama por libertad y es en respuesta a ese llamado que estamos presentes y actuantes. Construid vuestra fortaleza con la energía inexpugnable del espíritu. Para eso tenéis Mi Rayo. Por eso conocéis Mi Nombre.

2. Cada planeta corresponde a un estadio de la evolución universal. No existen dos planetas iguales, y lo mismo ocurre con los individuos. La creatividad cósmica es infinita, en múltiples formas revela su poder. La transustanciación de la materia terrestre ya está en acción, pero para desarrollarse necesita amplitud. Esa amplitud es fruto de la pureza, y por eso todos los rincones de la Tierra serán lavados. Mi Rayo participa activamente de ese proceso, abriendo camino hacia la eternidad. El futuro está tan próximo a vosotros como la respiración. La sucesión cronológica no es más que un condicionamiento que es superado cuando la conciencia penetra el reino del espíritu. Por eso os invitamos a dar alas al corazón y a alzar vuelo rumbo al Infinito.

3. El grado de densidad preponderante hoy en la esfera terrestre dificulta la percepción de los rayos de los diferentes planetas y estrellas. Sin embargo, esos rayos están siempre presentes y activos, tal como lo está el Sol en un día nublado. El discípulo debe elevarse por encima de las nubes y contactar esos rayos. Debe reconocer sus diferentes vibraciones, aprender a sintonizarse con ellos y a transmitirlos hacia la esfera material. Ese entrenamiento transcurre bajo Nuestra supervisión, y también en este caso son necesarios entrega y despojamiento del ser. El cáliz debe estar vacío para que pueda ser llenado; la campana debe estar libre de sedimentos para que, al ser tocada, vibre plenamente. Se aproximan tiempos de gloria, pero es necesario preparar al planeta para recibirlos.

4. En esta época, los rayos de Júpiter pueden ser detectados con mayor facilidad que los de otros planetas. Eso se debe a que Mi Rayo ha emergido en la esfera material. En el ámbito terrestre, la acción de los rayos planetarios y estelares es actualmente coordinada por el centro del Sol. El Sol es el regente del sistema, y en su aura habitan excelsas conciencias. Están siendo efectuadas coligaciones entre este sistema y otros puntos de la galaxia, y la unificación de corrientes intersistémicas es una realidad. La presencia viva de estrellas lejanas puede ser percibida en la Tierra, pues sus hijos están entra Nosotros. Nuestra Hermandad no mide esfuerzos para la consecución de la tarea, y os invitamos a participar en esta Obra. Para fundiros en esta corriente son necesarios ardor, disposición, entrega y fe. El resto lo hace el espíritu.

5. Para el hombre de la superficie de la Tierra, la experiencia con los rayos de los planetas recién está comenzando. Esa experiencia se desarrolla principalmente en la esfera sutil, a pesar de que sus efectos son claramente perceptibles en el mundo concreto. Saturno es una escuela de sacerdotes de la ley, mientras que Júpiter forma eximios gobernantes. La Tierra debería ser campo para curadores, y en esta afirmación se oculta la clave de su afinidad con Venus. En el pasado, Marte formó preciosos guerreros, mas su esencia está trasladándose hacia otras esferas. Mercurio penetrará los secretos del Sol, pues este sistema ya no necesitará del Mensajero. Cada planeta tiene coligaciones específicas con el universo cósmico y refleja en sus espejos los rayos de múltiples constelaciones. Cuando una información os es transmitida, ella se refiere a un ámbito determinado y por eso recomendamos flexibilidad y desapego. Algunos estudiantes piensan que la Enseñanza es contradictoria; no perciben que ella está presentando diferentes pisos de un mismo edificio. Por lo tanto, reiteramos: penetrad en la senda ardiente; en vuestro interior encontraréis las indicaciones que necesitáis.

6. Algunos miembros de esta humanidad ya cruzaron las fronteras del Sol, aunque ella, como un todo, haya permanecido prisionera del planeta. Aquí tenéis una clave: el círculo terrestre era imposible de trasponer para los hombres prisioneros de la Tierra, mas no para aquellos que sabían volar. Ese aprendizaje fue transmitido desde siempre a pocos elegidos, que en silencio recorrían la senda de las Iniciaciones. Hoy en día, la Tierra abre puertas a universos vecinos, pues la libertad futura está asegurada por los Consejos. Por eso estos tiempos son preciosos, y por eso podemos abiertamente develar realidades antes ocultas. Los que pueden oír las comprenderán.

7. Mucho de lo que os transmitimos en el pasado ya no tiene validez hoy. Esto no significa que la Enseñanza haya sido errónea, sino que la conciencia humana se expandió, y de este modo pudo abarcar coyunturas más amplias. Aquel que penetró el aura de la Verdad sabe que su esencia es intangible. Cuanto más se aproxima a esa esencia, ella se desplaza hacia una profundidad mayor. Así, nuevamente se recomiendan flexibilidad y desapego. Se necesita dinamismo para acompañar la ascensión del espíritu.

8. La verdad es relativa al ámbito en el que la conciencia se encuentra. Por eso el caminante despierto siempre actualiza sus patrones; él aprendió que, por más bello que sea el tejido, el artesano genuino nunca se da por satisfecho.

9. Hace tiempo os alertamos respecto de la intensidad de la batalla. Ahora os digo: mucho ha pasado, pero el conflicto todavía no llegó al fin. Lo que sucedió en las esferas sutiles llegará a precipitarse sobre la Tierra. Aun así, aquel que encuentra su fortaleza en el espíritu reconoce el poder de la Jerarquía. El vaso se romperá y, de ese modo, la esencia contenida en él se esparcirá por todo el planeta. Así, a partir del mal se hace el Bien.

10. Aquellos que perciben la proximidad de los nuevos tiempos deben adelantar sus pasos y manifestar, en la esfera concreta, el nuevo signo. Que no cedan a las invitaciones del enemigo. Que sigan la ley. Que estén atentos y, con el fuego del amor, alimenten su ligazón con la Jerarquía.

11. La progresión ígnea alimenta el poder de aquellos que responden positivamente al llamado. La armadura de fuego de esos seres se fortalece al recibir las flechas del enemigo. Su determinación es el heraldo de la nueva Tierra. Pero hay quienes no quisieron reconocer la urgencia de estos tiempos. Prefirieron la lasitud de una civilización enferma, en la cual los mejores patrones están entretejidos con las tinieblas. Mas Yo os convoco a la conquista ardiente. Yo os llamo al servicio. Yo pronuncio vuestro Nombre. Venid, ¡oh, hijos del Sol!

12. No esperéis recompensas. En el camino ascendente el gusano de la retribución se vuelve cada vez más sutil, hasta que es definitivamente expulsado del aura del ser. Para erradicarlo Nosotros indicamos silencio y humildad. Además, que el caminante dé sus pasos sin mirar para atrás.

13. La mezcla inapropiada de vibraciones, que hoy es tan común en vuestro planeta, debe ser rápidamente sustituida por una selectividad magnética. La capacidad de ejercerla va siendo desarrollada por la aspiración, por la entrega y, principalmente, por el discernimiento. El discernimiento nace de la fusión de las energías de los centros de la cabeza y del corazón y, por eso, es necesario el silencio. Reconoced la importancia del ritmo, y guiad correctamente los hilos de luz que la Jerarquía os envía.

14. El poder de una acción abnegada es inconmensurable. Su irradiación cruza fronteras, llega hasta los más distantes universos. Ahora que se aproximan los momentos finales de este ciclo, y que en la esfera concreta el horror ocupará el escenario de la vida de los hombres, se necesita fe y abnegación puras. El espíritu es inmortal, pero hay que dejarlo ascender.

15. Hasta hoy, en la superficie de la Tierra el manto de la vida fue tejido con hebras de dolor y de sufrimiento. A partir del resultado de sus elecciones, el hombre pudo ir aprendiendo a distinguir entre lo malo y lo bueno, entre lo bueno y lo correcto. Pero es necesario cambiar ese patrón; por ese motivo, vivís momentos de intensas pruebas. Ya no son el dolor y el sufrimiento, sino la firme determinación de avanzar lo que trazará el diseño que ha de ser expresado por ese tejido.

16. En todas las épocas hubo seres que dedicaron su vida exclusiva y completamente al supremo Señor de los universos. Desbrozaron caminos para la humanidad, fueron columnas dé energía para sustentar al planeta. Esa dedicación total es la marca de los que conocen la ley de la Jerarquía y a ella se unen. Nuestros rayos no son entregados a los tibios ni a los hipócritas, sino a aquellos que verdaderamente aman la luz.

17. ¡Sublime vestidura aguarda al ser en su nueva Morada!

18. La rendición del ego es un requisito para la liberación del espíritu. El espíritu no puede volar libremente mientras mantenga en la Tierra ese vórtice desagregador. La voluntad mayor debe absorber aquello que ha de rendirse a ella. Esa es la ley que, en estos tiempos, transporta al hombre hacia nuevos reinos, más allá del oscuro pantano del libre albedrío.

19. Supisteis reconocer correctamente la aproximación de Nuestro Mensajero. Pero se necesita mayor despojamiento, se necesita que estéis exentos de ideas y de expectativas. Todo lo que conocéis debe ser dejado de lado. Debéis estar vacíos, sin querer nada. Sabed, os conocemos profundamente, no hay nada que pueda estar oculto. Así, mantened encendida la llama interior, pues el Mensajero no tardará en volver.

20. La supremacía del espíritu sobre las esferas materiales existe como potencial, pero debe ser despertada, activada, dinamizada. Mi Rayo favorece el comienzo y el desarrollo de ese proceso y, en él, el discípulo encuentra fuerza para romper los obstáculos del camino. Vosotros, que cruzasteis el puente de la duda y podéis caminar con firmeza, no retardéis vuestros pasos. El nuevo amanecer aguarda a quienes puedan ser portadores de su luz.

21. Vuestras conquistas pasadas nada representan delante del futuro que os espera. ¿De qué os sirven las piedras que pavimentan el camino que dejasteis atrás? Servirán, sí, para los que os siguen, y también por eso es importante avanzar. Así como el espíritu construye su senda en lo invisible, el caminante da sus pasos en el vacío. Lo inédito no puede ser percibido hasta que llegue el momento de su manifestación.

22. La responsabilidad de los que caminan es grande, pero aún mayores son las bendiciones que reciben. La luz del mañana se refleja en el espejo de sus corazones y a partir de allí se proyecta en todo el planeta. Sí, cada eslabón de esa cadena es importante para la consecución de la tarea. El éxito no depende solo del poder de la Fuente, que es inconmensurable, sino también de la firmeza y de la prontitud que hay en los que lo reciben. Saber discernir es una necesidad en estos tiempos en que densas nieblas ocultan los rayos del Sol. Que el discípulo no se desanime ante las dificultades, sino que afile en ellas su espada.

23. ¡Heraldos de una nueva aurora, sois los mensajeros de la luz! Bajo vuestros pies descalzos fluyen el poder y el amor que renovarán la faz del planeta. Con vuestras manos construimos el templo que abrigará al espíritu liberado. En vuestro corazón, con las hebras de la eternidad son tejidas las vestiduras del nuevo hombre. Sí, Nosotros bendecimos a los que respondieron al Llamado. Nosotros fortalecemos la cadena del Bien. Nosotros afirmamos la Voluntad Suprema.

24. Aquel que se deja desanimar ante el ataque del enemigo no está preparado para ubicarse bajo el puro fulgor de la luz. Así como el metal se pone al rojo cuando es quemado por el fuego, incandescente debe ser el aura de los que buscan la verdad. Guerrero es el espíritu en viaje en este planeta, y firme debe ser su decisión de avanzar. Su armadura es forjada con la devoción al Supremo Señor, y en su frente resplandece la marca de los elegidos. Guerrero de la luz, Nuestra paz es vuestro aliento.

25. El fuego del espacio fortalece al espíritu en ascensión. En realidad, es su aliento y su vida. Que se aproximen los que buscan, Yo les mostraré el camino del nuevo Portal. Aquello que antes requería sucesivas encarnaciones para ser impreso en la materia, hoy se consuma en segundos, por la coligación con la Voluntad Suprema. Por eso deben ser dejados de lado las fantasías y los caprichos humanos. Esas sombras ya no corresponden al presente.

26. Muchos estudiantes, cuando son colocados ante una nueva fase de la Enseñanza, buscan comprobaciones en la fase antigua. Es verdad que la esencia es única, pero en lo viejo no se pueden encontrar sino simientes de las expansiones siguientes. Es necesario que el estudiante se vuelva hacia dentro de sí. Solo en su interior encontrará las pruebas que necesita.

27. Si en el pasado Me reconocisteis, ¿por qué no Me reconoceríais ahora?

28. No dejéis que el error eche raíces en vuestro corazón. Arrojadlo fuera rápidamente, entregádmelo a Mí. Yo lo acepto, Yo lo transformo en luz. Conoceréis Mi fuego, devoto discípulo, y en él os transfiguraréis.

29. Transformación continua de la materia en luz así se desdobla la senda de la sutilización. El planeta comienza a recorrer ese sendero. Lo aguarda un resplandeciente futuro, futuro que revelará la clave para el contacto con Nuestro Consejo.

30. La regencia del planeta es interna, y su verdadera Jerarquía está compuesta por rellanos de luz. El hombre está siendo invitado a trasponer los velos que encubren esas realidades sublimes y a colaborar en la manifestación de un tiempo nuevo. Por eso os fue revelada la existencia de los siete principales centros, y por eso Nuestros Mensajeros se acercan con tanta frecuencia a vosotros. La oportunidad de esta época es rara, y benditos los que, aunque envueltos en la oscuridad terrestre, creen en la luz del amanecer.

31. La Obra es infinita, sus raíces se hunden en la eternidad. Cada escalón construido se transforma en la base para el siguiente, y la ascensión continua es el aliento de los que participan en ella. Por lo tanto, alertad a los que llegan es necesario que se dejen impregnar por el fuego ardiente de la suprema devoción; es necesario que mueran para sí mismos; es necesario que sirvan a un único Señor. Sublime gloria bendice a los que así se rinden al poder del espíritu. En su vuelo llegarán a las más lejanas Moradas.

32. El corazón en llamas no se detiene delante de los obstáculos a la ascensión. Los supera a todos, con ellos se fortalece, en ellos glorifica al Señor. La gratitud emana del corazón en llamas, tal como el perfume emana de una flor. Su pureza refleja los misterios del cielo, su poder redime a los que lo siguen. Bendito es el fuego que consume su existencia y lo traslada hacia sublimes rellanos. ¡Corazón en llamas, tenéis en Mi Rayo vuestro aliento!

33. La base de la ascensión está en el querer. Por eso es necesario consolidar el Bien. El Bien debe ser consolidado a cada instante, y no solo en los llamados "momentos de oración". Es necesario redimir estas tierras, es necesario lavarlas del oprobio de un pasado oscuro. Que el discípulo alimente el fuego de Aurora (8), que ahora se funde en los centros hermanos (9).

34. No levanto todos los velos, pues no ha llegado el momento para eso. Debéis seguir el camino paso a paso; en él tendréis las flechas, las indicaciones y la protección. Conozco cada palmo de ese estrecho sendero, y reafirmo: estoy junto a vosotros. Cuando la oscuridad se vuelva aun más espesa, sabed: la luz se aproxima. Reafirmad vuestros votos y caminad. No cedáis a los convites del pasado, de vuestra victoria dependen muchos hermanos.

35. La potencia de la afirmación de la ley es conocida por pocos. Pero, con la decisión, es necesario romper la inercia del mundo material. Penetrad ese misterio, ¡oh discípulo de la verdad! Afirmad. Y construid así la fortaleza del Bien.

36. Antes que termine el ciclo actual, los centros planetarios se revelarán aun más abiertamente. De ellos emana la pulsación que sostiene la vida en la Tierra

37. Hubo un período en el cual Aurora se aproximó, de modo especial, a la vida externa de la esfera de superficie. Algunos de sus miembros llegaron a transitar, en cuerpos materializados, por ciudades y poblados de vuestra civilización. Preparábamos el aura del planeta para una manifestación más abierta de Nuestra Hermandad, que debía ocurrir todavía durante esta transición. En varios detalles Nuestro programa fue reformulado, pero tal hecho aún podrá llegar a suceder. Sin embargo, el contacto más importante con Nosotros es el que se establece en la esencia del ser y se fortalece en su ardor por la transformación.

38. Los centros vibran en un nuevo diapasón. Afinad vuestros oídos, acoged su esplendor.

39. Muchas notas componen este acorde: tres sobre siete, con cuatro en su base, y una infinidad de sonidos... ¡Qué bella es la armonía que está pronta para surgir! Que los corazones puros se preparen, pues la nueva Tierra se anuncia y, con ella, el Tiempo de las Revelaciones.

40. Conoceréis otros centros en los viajes que estáis realizando con vuestro traje espiritual. De cada uno aprehenderéis un color y un sonido; en cada uno dejaréis grabado a fuego vuestro Nombre. Aquellos que recorren la senda de las Iniciaciones saben de qué estoy hablando. Los que se preparan para ella escuchan estas palabras y descubren, en sus corazones, la alegría del porvenir. Siete puertas se abren en niveles distintos y doce grupos esperan a sus afines. Es tiempo de júbilo. Se aproxima la hora del Encuentro.

41. ¿Por qué teméis? ¿Por qué lloráis? En realidad, lo que perdisteis fueron las rejas de vuestra prisión. Os tornasteis libres. Volved la frente hacia el naciente. No os turbéis con la indecisión de los mortales. Abrid los brazos en cruz y abrazad la cruz que os es entregada. Sí, en alas se transformarán. Volad... El Infinito es vuestra Morada.

42. ¿De qué valen las promesas de los pequeños, si quieren lo que la ley no les puede dar? iOh!, dolor que consume en llagas la carne de esos transeúntes, ¿hasta cuándo seréis el instructor? Los hombres escogen destinos oscuros. Que la luz penetre en esas esferas. Sí, la luz está cercana. La redención de la materia se consumará.


- (8) Se refiere al centro intraterreno Aurora.
- (9) Se refiere a los demás centros planetarios activos en esta etapa de la Tierra.



Extracto del libro: TRIGUEIRINHO - LA VOZ DE AMHA

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