Formas Mentales. 2 de 3
V.B. Anglada
Las clasificaremos de acuerdo con los siguientes Grupos:
a) Las Formas de los AGNIS, Señores de las Salamandras.
b) Las Formas de los Ángeles AGNISHVATTAS, Señores del Fuego Mental.
-> c) Las Formas Mentales, o formas de pensamiento, de los seres humanos.
-> d) Las Formas Vibrantes de los misteriosos Arquetipos, cuya plasmación, desarrollo y cumplimiento constituyen el aliciente de la evolución Universal.
e) Las Formas Geométricas, grabadas en el Éter con carácter ígneo, que constituyen la raíz mística del Lenguaje de los Ángeles y de los hombres.
f) La Forma ígnea, esplendorosa y radiante del Gran Arcángel AGNI, el Dios del Fuego y Señor del Plano Mental.
c) Las Formas Mentales, o Formas de Pensamientos de los Seres Humanos.
Las reacciones de los seres humanos a las energías que proceden del Plano mental producen las formas de pensamiento. Estas son condensaciones de tales energías en diversos grados de sutilidad y pueden ser percibidas, si se poseen determinadas capacidades de visión, en cada uno de los niveles que constituyen el Plano mental; éste, como esotéricamente se sabe, es el Cuerpo Mental u Órgano del Pensamiento de la Divinidad.
Técnicamente hablando, podríamos decir que el pensamiento humano, en sus infinitas modificaciones, es un impulso eléctrico en respuesta a las condiciones ambientales y adopta una forma definida en contacto con los éteres que cualifican cada uno de los niveles mentales en donde el hombre puede utilizar su capacidad de pensar. Como ya dijimos en el apartado correspondiente, un tipo especial de AGNISHVATTAS en sintonía con la multiplicidad de mentes humanas es responsable de "las formas de pensamiento" de los hombres. La observación de tales formas, en cada nivel mental, le da al observador clarividente una exacta noción del desarrollo mental de la humanidad en cualquier momento cíclico de la historia planetaria. Actualmente pueden se detectados un muy elevado índice de formas KAMAMANÁSICAS, es decir, formas de pensamiento relacionadas con los impulsos emocionales, o técnicamente descrito, con los potentes estímulos del Deseo. Tales formas son visible en los más bajos subplanos del Plano mental.
Constituyen desde el ángulo esotérico potentes núcleos de poder magnético, "egregores de todas formas y vibraciones" que condicionan el modo de pensar de la gran masa de los seres humanos. En los niveles intermedios del Plano mental, en donde empieza a ser efectiva la labor de los aspirantes espirituales del mundo, las formas tienden a disociarse del Deseo y empiezan a cumplir una misión realmente importante desde el lado oculto, con plena independencia de los factores emocionales que condicionan el modo de pensar de la humanidad corriente. Estas formas de pensamiento son más sutiles y tienden a agruparse en ciertas definidas zonas del tercer y cuarto nivel del Plano mental, constituyendo vértices de energía positiva que lenta, aunque persistentemente, va introduciéndose en la mente de todos aquellos seres humanos cuya lucha en el plano astral empieza a tener un significado realmente espiritual y guía gran parte de sus actitudes y actividades frente a la vida organizada de la sociedad.
Esto significa que su pensar es inteligente y que están tratando de independizarse mentalmente del ambiente psíquico que les rodea y envuelve como una espesa nube... En el quinto nivel del Plano mental puede ser apreciada la labor del discípulo, del verdadero investigador esotérico, el cual actúa científicamente -si podemos decirlo así- orientando inteligentemente las energías mentales hacia los mundos superiores a fin de contribuir con su voluntaria y consciente aportación al desarrollo del definido Plan de perfección que el Logos Solar trata de llevar a cabo a través del Plano mental del Universo. A medida que la mente humana se hace vulnerable a los impulsos internos, las formas de pensamiento que surgen de la misma son más definidas, sutiles e incluyentes.
Ya no constituyen una masa condensada de energía mental en forma de nebulosa que va y viene de uno a otro extremo de los subplanos inferiores del Plano mental, atrayendo el pensamiento negativo de los hombres o sus vagas formas de pensar e influyendo sobre sus mentes en el sentido de una presión activa, constante y persistente sobre sus tendencias emocionales, sino que se han convertido en claras y nítidas formas de pensamiento llenas de intencionalidad y de permanente estímulo creador. A partir del quinto subplano del Plano mental (*) las formas son "arrúpicas", subjetiva y abstractas. Constituyen núcleos de energías armónicas, llenas de estabilidad y equilibrio.
* Se entiende el quinto subplano a partir de los niveles inferiores, es decir, de abajo hacia arriba. Contando de arriba hacia abajo, el quinto subplano se convierte en el tercero, es decir, el nivel causal en donde mora el Ángel Solar o Yo superior del hombre.
En el sexto subplano pueden ser percibidas -si se posee la necesaria capacidad de visión- las Formas Ideales de los Arquetipos, o Ideas Divinas, que constituyen el programa de acción del Creador para todo el Universo. En el séptimo subplano, el más elevado del Plano mental, pueden ser contactadas por los altos Iniciados las Formas de los Señores AGNISHVATTAS que centralizan en Sus exaltadas Vidas la Voluntad del Creador para los tres mundos de experiencia kármica, el mental, el emocional y el físico. Pueden ser percibidos también "los átomos permanentes" mentales que utilizan las Mónadas espirituales humanas para "descender" vía el SUTRATMA, o Hilo de la Vida, a los mundos inferiores.
La visión de tales átomos permanentes constituye una experiencia única para el investigador esotérico cualificado -un Iniciado de la Tercera Iniciación-, pudiendo observarlos como brillantes esferas ígneas de un poder radiactivo –utilizando aquí una locución científica correcta- o de energía cualificada que forma parte del Fuego Creador de la propia Divinidad por medio de los altos Regentes AGNISHVATTAS. Dichos REGENTES "avivan la visión y permiten penetrar en los Altos Designios del Señor", que en el Plano mental del Sistema comienzan a tener para el osado investigador un pleno e inteligente significado. Penetrar en el misterio de los átomos permanentes presupone establecer un definido contacto con la Mónada Espiritual, el verdadero SER del hombre, e iniciar la escalada hacia las superiores Iniciaciones que deberán ser recibidas en el Plano Búdico y en los cuerpos más sutiles del Iniciado. Resumiendo el proceso, podríamos decir que existen las siguientes Formas de Pensamiento:
a) Formas de pensamiento kama-manásicas, registradas en los éteres de los subplanos primero y segundo del Plano mental. Tales formas vienen condicionadas por los impulsos dinámicos del deseo y guardan cierto parecido por efecto de ello con las formas astrales o psíquicas a que hicimos referencia en páginas anteriores.
b) Formas de pensamiento generadas por los aspirantes espirituales del mundo, en proceso de desvinculación del segregado astral o emocional de la humanidad y actualizadas en los niveles tercero y cuarto del Plano mental.
c) Formas de pensamiento, de carácter geométrico, de gran pureza de líneas, creadas por los discípulos mundiales en distintos niveles vibratorios y constituyendo los centros luminosos a través de cuyos focos de luz llegan las energías superiores de la Mente a la humanidad. En líneas generales, los discípulos del mundo manejan creadoramente las energías del quinto nivel mental.
d) Formas de pensamiento Arquetípicas mantenidas en "suspensión creadora" en el sexto subplano del Plano mental por los AGNISHVATTAS responsables de su gestación y desarrollo. Sólo los más cualificados Videntes Iluminados pueden percibir, bajo ciertas circunstancias, tales Arquetipos, condensadores de las IDEAS de la Divinidad con respecto a Su Universo.
e) Formas de pensamiento netamente abstractas y expresadas como "energía mental pura", tal como pueden observarlas los altos Iniciados de nuestra Jerarquía planetaria. Constituyen centros magnéticos de Fuego Creador y de Intención Radiante y por medio de ellos la Voluntad del Logos expresa Sus Decisiones en el desarrollo evolutivo de Su Universo de Segundo Rayo.
Para un más correcto entendimiento del significado y finalidad de tales Formas, vamos a entrar seguidamente a considerar la obra de los Constructores de las mismas, es decir, de los grandes Ángeles AGNISHVATTAS que en su totalidad constituyen el Plano Mental:
Primer Nivel. Actúan los AGNISHVATTAS de la Objetividad. Poseen un gran poder aglutinante de los éteres mentales y su misión es unificar mediante el adecuado tipo de sustancia etérica los deseos de los hombres con la sustancia mental que generan los incipientes pensamientos humanos.
Segundo Nivel. En este nivel empieza a notarse cierta desvinculación entre las energías del deseo y las que provienen del Plano mental. En este particular subplano se perfila, siquiera vagamente, una línea de separación entre KAMA, el deseo, y MANAS, el poder coordinador intelectual.
Tercer Nivel. Los Señores AGNISHVATTAS de este subplano arremolinan las energías que proceden de los dos campos, emocional y mental. Crean, mediante un poder misterioso que les es propio, una sutil barrera de separación entre ambos campos. El mundo del deseo es separado del de la mente y ésta empieza a funcionar como un vehículo independiente.
Cuarto Nivel. Terminada la obra de los Ángeles AGNISHVATTAS del tercer subplano, empieza la actividad de los que se hallan en el centro mismo del Plano mental, es decir, el Cuarto subplano. Estos AGNISHVATTAS son los que cualifican a la mente humana como un vehículo plenamente independiente, ofrecido a la voluntad e inteligencia del Pensador, o Ángel Solar, en el Plano causal. Sólo una sutilísima línea de luz conecta la mente con el mundo del deseo. El pensamiento humano puede así adquirir forma coherente. Ya no se trata de formas vagas y nebulosas flotando como nubes en los ambientes individuales de los hombres y en sus contextos sociales. Se trata, por el contrario, de formas nítidas, brillantes, concretas, dinámicas y persistentes. Los Señores AGNISHVATTAS de este Cuarto nivel mantienen la coherencia de estas formas de pensamientos y las impulsan como corrientes de energía hacia las mentes de los seres humanos capaces de responder a sus vibrantes estímulos y beneficiarse de sus poderosas e incluyentes significaciones.
Quinto Nivel. Los AGNISHVATTAS del Quinto Nivel son definidos esotéricamente como "los ÁNGELES SOLARES". Cada uno de Ellos se halla estrechamente vinculado con el alma de un ser humano, constituyendo aquella maravillosa Entidad que oculta y místicamente llamamos "nuestro Ángel Guardián". Existen Siete Jerarquías de ÁNGELES SOLARES correspondiendo cada una a una definida línea de RAYO. Estos Señores AGNISHVATTAS proceden del Quinto Plano Cósmico y se introdujeron en el aura planetaria en la segunda mitad de la Era Lemuriana. Se caracterizan por su amor hacia los hijos de los hombres y constituyen en su totalidad "la Cuarta Jerarquía Creadora".
Sexto Nivel. En el Sexto Nivel operan los grandes AGNISHVATTAS que captan las IDEAS del Logos Soler y las convierten en los Arquetipos que han de presidir el destino de la evolución Solar, de la Naturaleza y de los Reinos. Cada uno de los subplanos mentales está dividido a su vez por otros siete subniveles. Los que corresponden al sexto SUBNIVEL del SUBPLANO mental que estamos estudiando pertenecen a los Arquetipos de cada uno de los Siete Reinos de la Naturaleza. Cada nuevo tipo racial humano y cada nueva especie mineral, vegetal o animal tienen allí su augusta fuente de procedencia. Los MANUES de las Razas y los Iniciados que cooperan en la actividad de los Devas de las Formas en todos los Reinos de la Naturaleza, están muy estrechamente vinculados con la obra de los grandes AGNISHVATTAS de este sexto nivel mental.
Séptimo Nivel. Este Nivel constituye el Subplano Atómico del Plano Mental. Es el mundo de las IDEAS de la Divinidad reflejándolas allí desde el Plano Monádico, en donde Sus Intenciones y Resoluciones se manifiestan como FUEGO ELÉCTRICO. Poco puede decirse acerca de este Nivel, salvo la consideración esotérica de que constituye el soporte dinámico de la Voluntad Creadora del Logos Solar en proceso de manifestación cíclica. Los AGNISHVATTAS de dicho nivel cuidan con especial dedicación las semillas puras de la Divinidad. Dichas semillas se expresan como los máximos incentivos de la evolución en forma de "los átomos permanentes" mentales de todos los seres humanos. Vistos desde el ángulo más puramente esotérico tales átomos permanentes constituyen el centro místico de la evolución de la humanidad. Es también en este Subplano atómico en donde se proyecta en forma misteriosa e indescriptible la Memoria Cósmica correspondiente al pasado de nuestro Universo, el cual, de esta manera, puede seguir así proyectándose en tiempo y espacio cumplimentando el glorioso Destino de la Divinidad.
d) Las Formas vibrantes de los Misteriosos Arquetipos, cuya plasmación, desarrollo y cumplimiento constituyen el aliciente de la Evolución Universal.
Todo cuanto dijimos en correspondencia con el Sexto Subplano Mental tiene absoluta validez aquí, por cuanto es en este nivel en donde se reflejan bajo Formas definidas los Arquetipos generados en forma de IDEAS por la Mente y Voluntad del Creador. Estableceremos al respecto una sencilla relación que aclarará el orden de las correspondencias analógicas entre cada uno de los niveles subsidiarios en el Sexto Subplano Mental:
# SEXTO SUBPLANO MENTAL.
Nivel - Reino -> Ángeles AGNISHVATTAS
Séptimo - Divino -> Impulsores de las Ideas
Sexto - Celestial -> Señores de los Arquetipos
Quinto - Espiritual -> Ángeles Solares
Cuarto - Humano -> Señores de la Voluntad Coherente
Tercero - Animal -> Señores de la Separatividad
Segundo - Vegetal -> Señores de Kama-Manas
Primero - Mineral -> Señores de la Objetividad
Téngase en cuenta, sin embargo, al observar el presente diagrama que se trata solamente de dar una ligera idea del mundo de las formas y de la función particular asignada a cada grupo de AGNISHVATTAS en relación con los Arquetipos que deben desarrollar en cada uno de los niveles de Actividad creadora. Todas las formas de la Naturaleza, sea cual sea su capacidad de respuesta vibratoria al impulso de la vida, proceden inicialmente de Arquetipos provenientes de uno u otro de los niveles subsidiarios en que está dividido el Sexto Subplano del Plano Mental. Tendremos así una idea bastante aproximada y comprensible de cómo funciona y se expande el proceso creador de las Formas con sólo efectuar, en relación con cada nivel subsidiario, la siguiente analogía. Por ejemplo: "Los Arquetipos del primer nivel corresponden a la evolución del Reino Mineral y son mantenidos en actividad vibratoria por los Ángeles AGNISHVATTAS, denominados esotéricamente "Señores de la Objetividad".
Los Arquetipos del Segundo nivel corresponden a la evolución del Reino Vegetal y son mantenidos en actividad vibratoria por los Ángeles AGNISHVATTAS ocultamente definidos como "Señores de Kama-Manas"... Y así sucesivamente hasta tener perfectamente clasificadas en nuestra mente las actividades de cada grupo particular de AGNISVATTAS en relación con el Esquema general correspondiente a los Arquetipos de cada Reino de la Naturaleza.
Vicente Beltran Anglada
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